Érase Una Vez en la Taberna Swan de Dianne Setterfield - Lumero
Su intención era crear un librillo elegante que incluyese todos los pueblos y aldeas, todos los mitos y cuentos populares, todos los embarcaderos y molinos de agua, todos los recovecos y curvas del río.
En una oscura y brumosa noche, en el pequeño pueblo inglés de Radcot, a orillas del Támesis, los lugareños se reúnen en la taberna Swan para compartir un trago e historias llenas de sabiduría popular. Con seiscientos años de antigüedad, la posada es famosa por reunir a los mejores narradores de cuentos populares, pero esa noche la tertulia nocturna se ve interrumpida por la llegada de un hombre misterioso empapado en sangre que carga en sus brazos a una niña inconsciente. Antes de que el hombre pueda emitir explicación alguna, cae derrumbado.
Mientras tanto, río arriba, dos familias buscan desesperadamente a sus hijas, Alice Armstrong, a la que nadie ha visto desde hace veinticuatro horas tras el suicidio de su madre, y Amelia Vaughan desaparecida dos años atrás sin dejar rastro.
En Radcot, una población a orillas del río Támesis, una noche de tormenta, en la taberna Swan entra un hombre ensangrentado que lleva en brazos a una niña de 5 años aparentemente muerta. Nada más entrar en la taberna, el hombre se acaba desmayando por lo que serán los habitantes de Radcot quienes deberán ir resolviendo lo ocurrido, pero ¿quién es ese hombre? y ¿por qué llevaba en brazos a una niña que no es suya?
El misterio, la fantasía y el folclore se mezclan en esta novela singular de Diane Setterfield, donde la autora emplea el agua que discurre por el río Támesis como elemento que enlaza las diversas historias que se dan en el libro. De esta forma, la autora se vale de las supersticiones e historias de fantasmas de los lugareños para crear un cuento, un cuento con una atmósfera envolvente, oscura y estremecedora, llena de magia y tradición.
Dividida en 5 partes, Érase una vez en la Taberna Swan nos presenta a un mar de personajes cuyos puntos de vista nos ayudarán, por un lado, a ir desentrañando poco a poco la misteriosa aparición en la Taberna Swan y por otro lado, a conocer las creencias y leyendas relacionadas con el río que los habitantes de los pueblos del sur de Inglaterra han ido compartiendo a lo largo de los siglos. Destacan entre estos personajes, la médico de Radcot, Rita, una mujer resuelta e inteligente y Robert Amstrong. Robert es un granjero y padre de familia educado, amable y encantador que siempre está dispuesto a ayudar a quien lo necesita, un hombre con muchísima humanidad, magnífico personaje.
Sin embargo, el encontrarse ya desde la primera página con tantos personajes, nombres e historias, puede resultar un tanto abrumador. Esto fue lo que me ocurrió a mí en un principio, ya que el saltar de un Punto de Vista a otro y de una historia a otra, hizo que me costase seguir la trama principal y por lo tanto, mi interés (en esos primeros momentos) decayese, e incluso llegué a plantearme abandonar el libro si no acababa remontando. Afortunadamente, esto no ocurrió y acabé totalmente enganchada a la novela tras darle una segunda oportunidad.